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Billetes Españoles












100 Pesetas. 1 de Julio de 1903. Sin serie. (Edifil 2023: 310, Pick: 53). Muy raro, especialmente sin reparaciones. Encapsulado PMG35. (para hacernos idea de la rareza, a fecha 1 de Noviembre de 2024, este billete es el tercer mejor calificado junto a otros dos billetes en PMG).
El llamado “Plan general para los billetes” del Banco de España de Noviembre de 1902 planteó el desarrollo de una serie de billetes con una lógica dimensional y un estilo común y original, desterrando definitivamente el uso de matrices y tarlatana, algo que ya iba a ocurrir con el primer billete de esas fechas, las cincuenta pesetas de Velázquez. Pero a diferencia de este billete, desde el punto de vista del diseño, los dibujos no debían estar inspirados en obras de arte conocidas, como una medida más para que fuera menos probable su falsificación. Una vez aceptada esta política de innovaciones a principios de 1903, el dibujo sería encargado a José Villegas Cordero, artista de renombre y a la sazón director del Museo del Prado en aquellos años. Los diseños del sevillano para estas primeras emisiones del siglo XX, en especial las de 1903 y 1904, son de una simplicidad sorprendente, monocolores y muy alejados de su estilo pictórico y temática costumbrista. La escasa calidad técnica decepcionó tanto al Banco de España que la emisión de 1904 ni siquiera circuló.
Estos billetes de 100 pesetas de 1903 en los que se representa alegóricamente el papel crucial del Banco de España en el desarrollo y progreso industrial del país, entraron en circulación en octubre de 1904 y ya a principios de 1905 fueron falsificados, lo que provocó, junto con la dimisión de Luis Marín, jefe técnico del taller de confección de billetes del Banco de España, que se contratara a la Bradbury & Wilkinson para dar un vuelco definitivo a la lucha de la institución contra las falsificaciones. Sin embargo, no todo es simplicidad en este billete. Se trata de la primera aparición de las fibrillas de seda en el billetario español, un invento que permanecería en uso hasta la mitad del siglo XX. El origen de este papel es francés, de la casa Perrigot-Masure, cuya fábrica se situaba junto al río Mosela en la comuna de Arches, provincia de Lorena. Como curiosidad, el director de esa casa, Jules Perrigot, era un apasionado del automóvil, y a él se deben los primeros códigos de circulación y un precursor del examen de conducir, justo en la misma época en la que se ponía en circulación este billete, un intento fallido de modernizar el papel moneda y, a la vez, una joya de la notafilia española por su diseño diferente y rareza.
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Jueves, 10 Abril 2025 | 16:00
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